(G. f. fulvus)
Tierpark Berlín, Berlín, Alemania
Safari Aldea del Fresno, Madrid, España
(G. f. fulvus)
Espace animalier de la Haute-Touche, Obterre, Francia 08/2019HABLIZL, 1783
El buitre leonado (Gyps fulvus) es un ave de carroña que ocupa todo tipo de terrenos,
preferentemente montañosos, del sur de Europa y el norte de África hasta el
centro de Asia.
De plumaje marrón claro, con más de 2 metros y medio de
envergadura alar y un peso que puede llegar hasta los 9 kg, es una de las aves
más grandes de Europa y también una de las que vive más años.
Las alas son
largas y anchas, rodeadas de negro, igual que la corta cola. Las plumas
primarias de los extremos de las alas están muy separadas, como si fueran dedos.
La cabeza y el cuello no tienen plumas, y están cubiertos de un plumón blanco
grisáceo, una adaptación para poder introducirlo con facilidad en el interior de
los cadáveres.
Exclusivamente carroñero, está especializado en el consumo
de grandes ungulados, tanto salvajes como domésticos, y especialmente importante
es esta aportación de alimento ligada al hombre en nuestro país.
Es un animal
monógamo que forma parejas estables que duran toda la vida. Nidifica en colonias
más o menos numerosas, dependiendo de los recursos que pueda aportar la zona, en
acantilados, peñascales y paredes soleadas, normalmente debajo de cornisas,
resguardado del viento y la lluvia.
Parc Animalier des Pyrènees
(G. f. fulvus)
Zoo de Duisburg, Alemania, 09/2011Parc Animalier des Pyrènees
La puesta tiene lugar entre los meses de
enero y febrero en nuestra región, y se compone de un único huevo que será
incubado por los dos miembros de la pareja. Los turnos de incubación pueden
durar hasta 48 horas, tiempo durante el cual un adulto puede ayunar sin
problemas. Después de unas siete semanas de incubación aparece el polluelo, que nace desvalido y sin plumas. Los padres lo cuidan con toda atención, protegiéndole del frío, la lluvia o el viento. Los adultos se turnan a la hora de cuidar al pequeño mientras el otra sale en busca de alimento. El progenitor encargado del aprovisionamiento se dirige al nido y regurgita allí parte del contenido estomacal, que es ingerido por el pequeño con avidez. Para calmar la sed del pollo realiza la misma operación, pero con agua. El crecimiento del pollo es muy rápido, y en apenas dos meses ya adquiere el tamaño de un adulto. Hacia las 10 semanas de vida, empiezan a ejercitar las alas y a moverse entre las cornisas del roquedo. Unas 6 o 7 semanas después empiezan a realizar sus primeros vuelos y en pocos días ya son capaces de alejarse largas distancias y buscar alimento por sí mismos. Hacia los 6 meses de vida, el joven buitre abandona el nido y se aleja en busca de nuevos territorios en los que asentarse.
En España, la transformación agraria y ganadera, la caza
directa y el uso incontrolado de venenos en el campo hicieron disminuir
drásticamente las poblaciones de buitres leonados, aunque en las últimas décadas
del siglo pasado, la estricta protección de la especie, la prohibición del
veneno en la naturaleza y la creación de comederos artificiales favorecieron su
recuperación.
Actualmente, sin embargo, el resurgimiento del uso del veneno,
la colisión con los cables de las líneas eléctricas y con las aspas de los
aerogeneradores, y la aplicación estricta de las normativas sanitarias respecto
a los despojos de ganado abandonados en el campo, se están convirtiendo en un
importante factor limitador de la estabilización de la población.
Burgers Zoo
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